Técnicos del INBIO presentaron investigación sobre bioestimulantes en soja durante foro de Aprosemp

El Instituto de Biotecnología Agrícola (INBIO) estuvo participando del Congreso de Semillas de la Asociación de Productores de Semillas del Paraguay (Aprosemp) a través de sus técnicos, quienes además presentaron en el foro un trabajo realizado sobre la utilización de bioestimulantes en la soja. Estas técnicas fueron utilizadas para complementar las necesidades de macro-micronutrientes del cultivo

El trabajo presentado por técnicos del INBIO es denominado “Efecto de inoculante, enraizante y fertilizante foliar en la producción de grano/soja” y tuvo un desarrollo que llevó dos años de investigación en donde se concluyó que si bien los bioestimulantes no pueden reemplazar a la fertilización de base, los complementa y mejora el aprovechamiento de los nutrientes en el suelo, brindándole al cultivo una mayor resistencia a factores climáticos adversos.

El trabajo fue realizado por el Encargado del Programa de Mejoramiento de Soja del INBIO, agrónomo Anibal Morel; el Encargado del Programa Agricultura Sustentable del INBIO, Ing. Agrop. Claudio Fleitas; y los técnicos del INBIO Ing. Agr. Alfredo Haedo; Ing. Agrop. Marcelo Riveros y la Encargada de Agronomía del Instituto Paraguayo de Tecnología Agraria (IPTA), Ing. Agrop. Fidelina Amarilla.

El análisis arrancó debido a la cada vez mayor utilización de bioestimulantes en la agricultura, y que existe una inmensa gamma de productos disponibles en el mercado de fertilizantes foliares, enraizantes e inoculantes  con diferentes presentaciones, que podrían ser útiles en el manejo del cultivo de la soja. Las combinaciones de bioestimulantes es una de las alternativas que se viene impulsando en Paraguay ya que la utilización de distintos nutrientes pueden contribuir en la calidad, rendimiento, y más tolerancia a ciertos patógenos y plagas.

“En el estudio no se observó una diferencia estadística significativa, pero sí redunda en retorno económico a favor de la utilización de una combinación de bioestimulante en términos de rendimientos, ya que hay un diferencia de 581 kg/ha con el uso  a la inversión que el productor recibe comparando el uso combinado de estos estimulantes al testigo sin aplicación, con esto se paga los productos y su aplicación dejando aun un margen positivo”.

Detalló el Ing. Agr. Alfredo Haedo, uno de los técnicos del INBIO, a cargo de la investigación.

Metodología y productos

La investigación se realizó en el predio del IPTA, en Capitán Miranda, departamento de  Itapúa. Fueron dos años de evaluación del trabajo, zafra 2018/19 y 2019/20. El diseño utilizado fue en bloques completos al azar, con 18 tratamientos combinados con 8 productos y un testigo por 4 repeticiones: Testigo (normal); E1 Enraizante: Ajifol CoMo; E2 Enraizante: Timac; E3 Enraizante: Potamol; Paquete 1 Ajifol: Enraizante+CaBo+NPK; Paquete 2 Timac: Enraizante+Bioestimulante+CaBo; Paquete 3 Potamol: Enraizante en tratamiento de semilla+enraizante vía foliar; Inoc liq: Inoculante líquido: ACQUA; Inoc Sol: Inoculante sólido: Leguminate. Se realizaron diferentes aplicaciones en tratamiento de semilla, a los 20 días de la emergencia, R1 y R5, con la variedad SOJAPAR R24 de ciclo semi precoz.