- Publicado: 14 de mayo de 2021
- Categoría: Noticias INBIO
El año 2021 se cumplió el centenario del ingreso de la soja al Paraguay por parte de un visionario que estando en el extranjero conoció de sus propiedades nutritivas para un país con una alta tasa de desnutrición en la población.
Pedro Nicolás Ciancio Sarubbi, hijo de los inmigrantes Italianos Giuseppe Ciancio Ferraro y Filomena Sarubbi Donnadia, nació en Caazapá en 1892, fue el primer médico pediatra paraguayo y se recibió en la Universidad de Nápoles (Italia), con medalla de mejor egresado. Aplicado a la especialidad de clínica médica, recorrió famosos centros de investigación en Roma, Turín y Florencia, entre otros.
Ciancio conoció las propiedades de la soja a través de un profesor de la Universidad de Nápoles y la consideró como una fuente interesante para el balance proteínico de la alimentación paraguaya, a un costo razonablemente accesible a la población, como una de las alternativas para luchar contra la desnutrición de la población.
Tras volver de Italia, en 1921 introdujo granos de soja al Paraguay, la germinación de esos primeros granos y la aclimatación lo realizó en Caazapá, de donde es oriundo. Tras largos años de estudios y experiencias logró obtener tres variedades propias para el Paraguay, además enseño su cultivo.
Dedicó su vida para tratar de formar la conciencia nacional sobre el valor alimenticio de la soja, además de sus diversos usos. Es considerado el estudioso que más ha hecho por la difusión de la leguminosa en América y sobre la cual tiene varios libros escritos.
Uno de ellos LA SOJA Y EL PROBLEMA ALIMENTARIO DEL PARAGUAY, es su libro más reconocido, fue una obra premiada por el MEC en 1949, por ser considerada de interés Nacional para el Paraguay. En esa obra estaba plasmada su experiencia son la soja a nivel local, además se encuentran recetas de usos y aplicaciones, y la misma estaba redactada en español e inglés. En esa obra fue plasmada su experiencia con la soja a nivel local y reeditada en 1974.
Entre las tantas obras redactadas por el médico impulsor de la soja están:
- LA SOJA: SU VALOR NUTRITIVO, SU IMPORTANCIA ECONÓMICA, SU VALOR INDUSTRIAL, SU IMPORTANCIA COMERCIAL;
- LA SOJA Y SU GRAN IMPORTANCIA EN LA NUTRICIÓN DE NUESTRA RAZA, SU PORVENIR COMO NUEVA FUENTE DE RIQUEZA NACIONAL, conferencia dada en la Universidad Nacional, en marzo de 1942;
- LA TÉCNICA DEL CULTIVO DE LA SOJA EN EL PARAGUAY EN VEINTITRÉS AÑOS DE EXPERIENCIA.
Estos trabajos fueron reproducidos en muchos periódicos y revistas del país y del extranjero. El doctor Pedro Nicolás Ciancio Sarubbi fue catedrático de la Universidad Nacional de Asunción, y era miembro de sociedades científicas del exterior.
Sus descendientes, recuerdan que el profesor doctor, Pedro Nicolás Ciancio Sarubbi, en el momento de la introducción de la soja al Paraguay recibió la indiferencia de la población y de las autoridades ante su prédica, sin embargo ante esa situación el mismo no claudicó y siguió promoviendo su cultivo y utilización. Incluso recuerdan que lo llamaban de forma despectiva “doctor soja” por su incansable lucha a favor del cultivo y consumo de la leguminosa.
El largo camino de la valorización del cultivo de la soja en Paraguay adquirió un protagonismo nutricional casi veinte años después de su introducción, ya que se la comienza a conocer como la “carne vegetal” por su contenido de proteínas. En el año 1940, el presidente de la Republica, José Félix Estigarribia ordenó la incorporación de la soja a la ración del ejército, desde la década del 40 el gobierno comienza a fijar el precio de referencia de la soja con lo que se admite su importancia económica.
Las escuelas agrícolas nacionales por resolución número 13 del 29 de Mayo de 1948, estableció en carácter obligatorio el cultivo de dos hectáreas de soja como mínimo en cada escuela agrícola de la República. La resolución llevó la firma del Ing. Agr. Lorenzo Mengual, director General de Enseñanza Agrícola.
La búsqueda de rubros capaces de cumplir con la doble función de alimentación y al mismo tiempo convertirse en un rubro renta, significó la transformación para el país de una agricultura modesta y de subsistencia a una agricultura mecanizada, responsable de gran parte del ingreso de divisas a la nación, con presencia internacional y factor multiplicador en el transporte, la logística y las finanzas.
Hoy la soja representa uno de los rubros más importantes dentro de la cadena de valor del agro, sin embargo, queda la duda de cuál podría haber sido la expansión e importancia del cultivo de la soja, además del conocimiento de sus beneficios e industrialización de haber sido atendida por las autoridades las recomendaciones que Ciancio dio hace un siglo atrás.
Actualmente los productores de la agricultura familiar van apostando con más confianza al cultivo de la soja, resultado de ello son los números actuales de crecimiento en pequeñas fincas, además de la utilización de las buenas prácticas agrícolas de modo a que el rendimiento de sus parcelas estén con los parámetros elevados. Sin embargo, aún nos queda un largo camino a recorrer para que la soja entre dentro de la dieta alimentaria de los paraguayos y sea reconocida como una excelente fuente de proteínas.
Reconocimientos recibidos anteriormente
El 2 de diciembre de 1952, Pedro Nicolás Ciancio Sarubbi recibe la Condecoración Papal de CABALLERO DE LA ORDEN DE SAN GREGORIO MAGNO, otorgada por el Papa Pio XII, de manos del Nuncio Monseñor Federico Lunardi, en la Ciudad de Caazapá. La Gran Cruz de San Gregorio Magno es la más alta condecoración con la que el Santo Padre distingue y agradece a un fiel laico su servicio generoso y eficaz a la Iglesia.
El 25 de enero de 1994, en Caazapá, recibe la Condecoración Orden Nacional al Mérito, en el Grado de Comendador, entregado a su viuda la señora ADELA SARUBBI VDA DE CIANCIO, por parte del presidente de la República, Ing Juan Carlos Wasmosy.
Reconocimiento por la introducción de la soja
Desde el Instituto de Biotecnología Agrícola (INBIO) impulsamos que el 2021 sea declarado “Año de la Soja en Paraguay”, en reconocimiento al doctor Ciancio por haber introducido hace 100 años atrás a la soja y pregonado su cultivo y utilización. Con la presentación de una nota y argumentos ante el Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG), solicitamos que por su intermedio a la la presidencia de la República del Paraguay, que el 2021 se declare el “Año de la Soja en Paraguay”.
Por Resolución del MAG número 324 de 02 de marzo de 2021 se declara de “Interés ministerial el cultivo de la soja en Paraguay”.
Luego por decreto número 5217 del 05 de mayo “Por el cual se declara el año 2021 como año de la soja en Paraguay y se otorga reconocimiento póstumo al doctor Pedro Nicolás Ciancio”.
Por otra parte, el pasado 06 de mayo como parte del festejo de nuestro 15 aniversario realizamos el descubrimiento de un sobre la calle Dr. Pedro Nicolás Ciancio en su intercepción con la calle Brasilia en Asunción; donde coincidentemente queda el local del INBIO.
En el monolito, -que tiene como principal foco la celebración del centenario del ingreso de la soja al Paraguay, por parte del profesor doctor Pedro Nicolás Ciancio Sarubbi- se encuentran grabadas dos frases históricas del mismo, pronunciadas en diferentes ocasiones, en relación de la soja.
“No es pobre un país que como el nuestro puede poseer en forma relativamente abundante y barata las dos fuentes más ricas de proteínas que se conocen: la carne y la soja”
Conferencia en la Universidad Nacional de Asunción, 06 de marzo de 1942.
“En más de una ocasión os habéis referido a la gran importancia de la Agricultura. Y habéis pensado bien, la tierra es el destino mismo del hombre; y particularmente para nuestro país, en esta etapa de su desenvolvimiento económico. En la agricultura reside toda su esperanza. Es el cultivo de la tierra y en el cultivo de la tierra y en su cariño de donde nace hondo el afecto a la vida sencilla y virtuosa y creo señores que es el amor a la tierra, a la que se fecunda con sudor y sangre y en la educación cristiana que es virtud y dignidad, donde está el secreto de nuestra redención moral”
Discurso pronunciado ante el Presidente de la República José Félix Estigarribia, en Caazapá, 1939.
Fuentes:
- Libro El Visionario y su legado, de Beatriz González de Bosio;
- LUIS MARIANO CIANCIO PETTERS (Bisnieto);
- FILOMENA CIANCIO (Nieta)
- INÉS CIANCIO (nieta)
Sobre INBIO
El Instituto de Biotecnología Agrícola (INBIO) es una asociación civil sin fines de lucro, que tiene el propósito de promover un adecuado acceso al país de los productos derivados de la biotecnología agropecuaria y la incorporación ordenada de los mismos a la producción nacional, así como promoción y desarrollo de la investigación de biotecnología nacional. Siete gremios forman parte de la institución: CAP, APS, APROSEMP, FECOPROD, CAPECO, PARPOV y UNICOOP.
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