Monitoreo Agrometeorológico – 20 de enero de 2025

De acuerdo a lo observado, las condiciones de disponibilidad de agua en las unidades de suelos de los Departamentos monitoreados, presentan estados que se encuentran entre “Sequia (0-10%) y Excesos Hidricos”. A la fecha de análisis la mayoría de los suelos presentan estados deficitarios de humedad en relación a las necesidades hídricas del cultivo. Estas condiciones estarían asociadas al régimen pluviométrico, las características físicas de los suelos y la evapotranspiración.

De acuerdo a lo observado, las condiciones de disponibilidad de agua en las unidades de suelos de los Departamentos monitoreados, presentan estados que se encuentran entre “Sequia (0-10%) y Excesos Hídricos”. A la fecha de análisis la totalidad de los suelos presentan estados deficitarios de humedad en relación a las necesidades hídricas del cultivo. Estas condiciones estarían asociadas al régimen pluviométrico, las características físicas de los suelos y la evapotranspiración.

De acuerdo a las proyecciones, se anticipa que la temperatura máxima absoluta alcanzará nuevamente los 40 °C en ciertas áreas de la Región Occidental. En el resto del territorio nacional, se estiman valores máximos que oscilarán entre 35 °C y 37 °C en zonas específicas.

Estas condiciones térmicas incrementarán la tasa de evapotranspiración, lo que acelerará la pérdida de humedad en el perfil del suelo, especialmente en suelos de textura arenosa, los cuales exhiben una baja capacidad de retención de agua y una mayor vulnerabilidad a déficits hídricos durante períodos de alta demanda evaporativa.

Las proyecciones para esta semana indican la posibilidad de precipitaciones importantes en ciertas áreas del territorio nacional. Se espera que estos acumulados logren la recarga de los perfiles de humedad del suelo a niveles óptimos, lo cual es crítico debido al déficit hídrico acumulado durante un período prolongado sin lluvias relevantes. Esta situación adquiere mayor relevancia considerando que muchas parcelas agrícolas se encuentran en etapas fenológicas sensibles de llenado de granos, en las cuales la disponibilidad de agua es determinante para los rendimientos. Adicionalmente, estas precipitaciones podrían mejorar las condiciones edáficas necesarias para la siembra de cultivos correspondientes a la zafriña.

Sin embargo, los modelos meteorológicos continúan señalando una distribución espacialmente irregular de las lluvias, con estimaciones de acumulados que varían entre 1 y 15 mm en sectores específicos. Las principales áreas afectadas incluyen algunas zonas del norte de la Región Oriental y diversos sectores de la Región Occidental.